La maternidad cambio mi vida de forma radical, como la de todos los que somos padres, me hizo inmensamente feliz entre otras cosas buenas pero también más oronda y significativamente más blandita de lo que era antes de llegar a este título.
Durante estos años parezco haber tenido «patente de corso» para descuidarme, excusas tenía miles: «tengo un bebe que absorbe todo mi tiempo», «tengo dos bebés, el secador no entra en mis planes», «solo tengo tiempo para el parque y por las noches acabo rendida, los niños crecen y cada vez necesitan más tiempo en lugar de menos», «tengo problemas de cervicales no puedo hacer deporte», «tengo tanta prisa que solo puedo llegar cogiendo el coche…» Cualquier excusa que se os pase por la cabeza, sumadla, seguro que también la he puesto.
Los tratamientos de fertilidad, la dejadez y la auto-complacencia han hecho de mí una hermana bajita del muñeco de Michelín. Estoy en un momento de mi vida en que con 42 años no quiero «dejarme» por más tiempo. Tengo claro que no volveré a desempolvar la ropa de los 20 pero la fuerza de voluntad me acompaña y y ha llegado el momento conseguirlo y…
TENGO UN PLAN que consta de los siguientes pasos:
1. El primero y principal es perder peso y para ello es imprescindible UNA DIETA. Una cosa que tengo clara de siempre es que los milagros no existen y que las dietas las tienen que poner los especialistas en ello y yo cuento con LA MEJOR, Inma Ramírez Nutricionista, si estáis en la zona de Murcia pasa consulta en la Parafarmacia Farmacentro de El Palmar.
Inma, que además es una buena amiga, es la encargada de enseñarme a comer, la pobre lleva años intentándolo pero esta vez lo consigue. En mi plan entra encontrar recetas saludables de pocas calorías y bajar el consumo de hidratos de carbono pero Inma #losbiscotesnosonpan.
2. Nunca he sido muy deportistas pero mis cositas hacía pero con la excusa de una lesión de espalda hace años que lo abandone con algún amago de vuelta pero sin éxito por lo que otro punto importante del plan es VOLVER AL DEPORTE y hacer más ejercicio. Pilates dos días por semana, ir al trabajo en bici y andando y coger transporte público para evitar ir en coche de puerta a puerta son las claves a seguir.
3. Como tampoco he sido nunca mujer constante en mis cuidados, este tercer punto se me está haciendo un poco cuesta arriba pero no cejo en el empeño de conseguir UN RITUAL DE BELLEZA DIARIO. Limpieza y nutrición facial nocturna, anticelulítica, reafirmate de pecho y cuidado de pies que son mi punto débil son los pasos a seguir cada noche, (lo de las mañanas lo llevo peor, las cremitas recien levantada no son los mío).
Y no creáis que estoy sola en este empeño, tengo unos buenos aliados:
Por un lado lo que Lucía Baballa llamaba en un post de hace tiempo jugar la baza de la envidia (me encanta el concepto, no dejéis de visitar el artículo); consiste en que cuando no es suficiente ese anhelo de «estar buenorra» ponerse el objetivo de «estar tan buenorra como» esa madre del cole que va siempre perfecta a todas horas, esa vecina que luce las mallas de Oyso como si las hubieran diseñado para ella, como esa amiga por la que no han pasado los años…
Por otro, formar parte de la Comunidad Dieta Sana y Ejercicio que ha creado Carmen Quintano, la autora del blog Bizcocho de Chocolate (parecen antagónicos los dos conceptos pero Carmen está sabiendo llevarlos muy bien). Retos, consejos de expertos y gente que quiere alcanzar metas saludables en una plataforma muy bien llevada apoyada por perfiles más que atractivos en redes sociales. Os dejo adivinar cual es mi equipo
y por último los lectores de este post, que después de contarlo aquí, no puedo más que conseguirlo porque que vergüenza tener que volver aquí a escribir que he fracasado.
¿Qué me decís, os animáis también #CAMBIANDOHABITOS?
Mil besos, mil sonrisas
Ana
¿Mi mundo? Los míos 